Hay vidas que parecen fuertes por fuera, pero su fe superficial se revela frágil cuando llegan las pruebas. En este estudio de la tercera carta de Juan, Juan nos exhorta a imitar lo que es bueno, rechazar aquello que debilita nuestra vida espiritual y cultivar una fe sólida que dé testimonio del poder de Dios. A través del ejemplo de Demetrio, descubriremos qué significa vivir con integridad y profundidad en nuestra fe, de manera que nuestro caminar diario honre al Señor y sirva de luz para otros. Aprendamos juntos cómo fortalecer nuestra vida espiritual para que resista cualquier desafío y glorifique a Cristo.