
Resistiendo la oposición con fe
El pueblo comenzó bien: obedecieron, construyeron y celebraron. Pero pronto llegó la oposición. Enemigos externos intentaron infiltrarse, y cuando no lo lograron, usaron la intimidación y las falsas acusaciones para detener la obra. El resultado fue un largo periodo de desánimo. En este mensaje aprenderemos que el desánimo espiritual puede ser tan peligroso como el ataque directo. Pero también veremos cómo la fidelidad de Dios nos sostiene aun cuando nuestras fuerzas flaquean. Este es el episodio 4 de la serie Bajo la buena mano de Dios.