- Serie: Ministrando a las multitudes
- Lucas 12:49-59
Hoy contamos con tecnología que anticipa tormentas, rastrea huracanes y nos advierte de todo tipo de peligros. Pero hay una advertencia mucho más importante que la mayoría decide ignorar: el día en que cada persona tendrá que presentarse delante de Dios. Jesús habló con una franqueza inesperada sobre ese momento inevitable. Sus palabras son tan claras que incomodan, pero a la vez abren los ojos a una realidad que no podemos pasar por alto. Este pasaje nos invita a reflexionar en lo que está en juego: no solo esta vida, sino la eternidad.










